La burrata es un queso fresco italiano compuesto por mozzarella y nata. Su sabor suave y cremoso lo convierten en una verdadera delicia para el paladar. Sin duda, un acertado contraste con el gusto de las patatas al horno.
- Lava las patatas y córtalas en gajos.
- Precalienta el horno a 180°C.
- Lava y corta la mitad de las cebolletas por la mitad.
- Coloca las patatas y las cebolletas en una bandeja de horno con papel de hornear. Úntalas con aceite de oliva, sazona y hornea durante 20-30 minutos. Añade las cebolletas y hornea durante otros 10 minutos. Una vez listas, pásalas a una fuente.
- Prepara el aliño mezclando 2 cucharadas de aceite de oliva, el zumo de medio limón y una pizca de sal. Mezcla el aliño y las patatas.
- Tritura las avellanas y pica finamente el resto de las cebolletas y el cebollino. Añádelos a la ensalada de patatas.
- Coloca la mozzarella en el centro justo antes de servir.
Consejo:
Para dar un toque de color adicional, puedes sustituir el cebollino por arándanos secos.